Cuando llegaron a España y les propusimos utilizar nuestra tecnología para optimizar la gestión de la limpieza, la ropa de cama y el mantenimiento (https://doinn.com/), nos derivaron al equipo de Canadá, y no hubo manera de convencerles para invertir en un SaaS que, objetivamente, les habría ahorrado millones.
Han contado con personas fantásticas en su equipo, y coincido plenamente contigo, Enrique: la hospitalidad no se reinventa solo con una app ni con un discurso bonito. La verdadera transformación empieza por la base, y eso implica reducir el OPEX, algo fundamental en cualquier empresa del sector hospitality que aspire a ser sostenible y competitiva a largo plazo.
Realmente es una pena que no prosperase el modelo, es bueno para todos, y especialmente doloroso, como en todos esto casos, las personas fantásticas que no han podido consolidarlo.
Excelente y muy oportuno Sr. Enrique, le confieso que todo este tema me apasiona.
Además estimo que lo de Sonder en forma alguna es el fin de la hotelería digital, es un simple recordatorio: la visión sin estructura se agota.
La tecnología impulsa, pero no reemplaza la disciplina ni el equilibrio; y mucho menos la humanidad.
Innovar no es correr más rápido, sino crecer con sentido y sostenibilidad.
Sin embargo no hay que olvidar que, de cada caída nace un aprendizaje, y de ese aprendizaje, un futuro más sólido para quienes seguimos creyendo en reinventar la hospitalidad.
Cuando llegaron a España y les propusimos utilizar nuestra tecnología para optimizar la gestión de la limpieza, la ropa de cama y el mantenimiento (https://doinn.com/), nos derivaron al equipo de Canadá, y no hubo manera de convencerles para invertir en un SaaS que, objetivamente, les habría ahorrado millones.
Han contado con personas fantásticas en su equipo, y coincido plenamente contigo, Enrique: la hospitalidad no se reinventa solo con una app ni con un discurso bonito. La verdadera transformación empieza por la base, y eso implica reducir el OPEX, algo fundamental en cualquier empresa del sector hospitality que aspire a ser sostenible y competitiva a largo plazo.
Realmente es una pena que no prosperase el modelo, es bueno para todos, y especialmente doloroso, como en todos esto casos, las personas fantásticas que no han podido consolidarlo.
Qué buen artículo, gracias!
Muchas gracias, Rodrigo.
Excelente y muy oportuno Sr. Enrique, le confieso que todo este tema me apasiona.
Además estimo que lo de Sonder en forma alguna es el fin de la hotelería digital, es un simple recordatorio: la visión sin estructura se agota.
La tecnología impulsa, pero no reemplaza la disciplina ni el equilibrio; y mucho menos la humanidad.
Innovar no es correr más rápido, sino crecer con sentido y sostenibilidad.
Sin embargo no hay que olvidar que, de cada caída nace un aprendizaje, y de ese aprendizaje, un futuro más sólido para quienes seguimos creyendo en reinventar la hospitalidad.
Respetuosamente,
OM
Gracias Oswaldo, totalmente de acuerdo.